gregory castellanosPor Lic. Gregory Castellanos Ruano

Tras el terror desde el techo protagonizado por la bruja de Yásica, la casa de la calle Imbert esquina calle Antera Mota, frente a la ferretería Canahuate, consolidó la fama de ser llamada «La casa misteriosa« por el hecho de haberse desarrollado en su derredor como en su seno verdaderas historias de terror prácticamente sin término.

Precisamente unos cuatro meses después de dicho episodio, en horas tempraneras del día un enorme cuervo negro del tamaño de un pavo adulto bien alimentado se aposentó sobre la esquina Noreste del techo de dicha casa siendo visto con gran asombro y numerosos comentarios por los parroquianos que por allí pasaban, lo mismo que por los habitantes de la casa en cuestión. Aquel cuervo permaneció toda la mañana y toda la tardecaminando sobre ese techo y viendo hacia abajo hasta que al empezar a declinar el Sol levantó vuelo con destino hacia el Oeste, e inmediatamente, desde este mismo punto cardinal, llegó un búho negro enorme que duplicaba el tamaño de aquel cuervo, es decir, era del tamaño de dos pavos adultos bien alimentados colocados uno sobre el otro; dicho búho permaneció desde su llegada y toda la noche caminando sobre el techo y viendo hacia abajo como buscando algo; como al momento de su llegada el día estaba en trance de muerte aquel enorme búho negro tampoco pasó desapercibidopor los parroquianos que por allí pasaban, lo mismo que por los habitantes de la casa en cuestión, todos los cuales también comentaron la presencia de este último. Al morir la noche y nacer el día volvió el enorme cuervo negro; y al ir muriendo la tarde se vio irse nuevamente dicho cuervo y llegar también nuevamente el enorme búho negro. Este irse y venir tanto el uno como el otro se produjo durante tres días consecutivos.

Al cuarto día, al intentar uno de los habitantes de la casa salir por la puerta principal un torrente masivo de ratas, de centenares de ellas, invadió la casa dirigiéndose hacia las diferentes partes de la casa, tanto en la primera planta como en la segunda planta, provocando un gran susto entre los habitantes de aquella casa lo que originó que los mismos se armaran de palos para golpear y así tratar de lograr que aquellos animales salieran de la misma; como los habitantes de la casa pidieron auxilio a sus vecinos, estos se incorporaron a aquella actividad de combatir con palos la presencia de dichas ratas en dicha casa. Con el referido auxilio de los vecinos se logró apalear y matar aquella masiva cantidad de ratas, cuyos cadáveres fueron tirados en la basura formando una apreciable loma de ratas.

Al quinto día, al intentar el mismo habitante de la casa salir por la puerta principal un torrente masivo de cucharachas, de millares de ellas, invadió la casa y procedió a dirigirse también hacia las diferentes partes de la casa, tanto en la primera planta como en la segunda planta, provocando otro gran susto entre los habitantes de aquella casa originando que los mismos se armaran de escobas y de palos para golpear y tratar de lograr que dichas cucarachas salieran de ella, pues las cucarachas eran tantas que formaban un grueso mantel de unas sobre otras, dificultando, inclusive, el caminar en dicha casa; como sucedió con las ratas, los habitantes de la casa pidieron auxilio a sus vecinos, los cuales también se incorporaron a la tarea de combatir la presencia de dichas cucarachas en aquella vivienda. El auxilio de los vecinos fue nuevamente determinante en esta segunda labor de exterminio, tras la cual los cadáveres de las cucarachas fueron tirados en la basura donde formaron una nueva loma semejante en tamaño a la que el día anterior había formado la de las ratas.Pero aquellas extrañas apariciones de tantas ratas y de tantas cucarachas eran comentada como cosas extrañas, misteriosas tanto por los dueños de la casa como por los vecinos que les auxiliaron.

Al sexto día, el habitante de la casa que solía salir de primero de la misma escuchó que tocaban en la puerta exactamente a la hora por donde acostumbraba salir y precisamente a la hora exacta en que se disponía a tal cosa, al abrir la puerta se encontró con una señora negra vestida toda de negro, sólo los cabellos blancos de élla establecían la diferencia.

-¡Buen día!   -Le dijo aquélla señora, con tono austero.

-¡Buen día! ¿En qué le puedo servir?-Respondió aquél habitante de la casa.

-Quiero hablar con tu madre y con tu padre, ¿puedes llamarlos?

– ¿Cómo no? Déjeme llamarlos, pero pase usted y tome asiento.  –Dirigiéndose entonces aquél joven adulto de la casa de inmediato a la habitación de sus padres situada en la segunda planta para anunciarles la presencia de aquélla señora anciana negra. Tras efectuarles dicho anuncio a sus padres les comentó a éstos:

-A mí me parece haber visto ese tipo de vestimenta anteriormente, pero no recuerdo bien, no preciso, el recuerdo es muy vago.

Tras ponerse ropas para atencionar a la extraña visitante y llegar a la sala en uno de cuyos sillones se había sentado la señora toda vestida de negro, la pareja de esposos reconocieron las vestimentas: eran del mismo tipo que usaba la bruja de Yásica cuando escenificó lo que escenificó desde el techo de esa casa, lo que dio lugar a que ambos se asustaran, se expresaran y le preguntaran temblorosos:

-¡Dios mío! ¿Quién es usted? ¿Qué usted hace aquí? ¿Qué usted quiere?

– Veo que se imaginan lo que soy, pero no se preocupen, no he venido en son de destrucción, sino de investigación.   –Le respondió aquélla extraña y tempranera visitante que continuó identificándosele y diciéndoles:

Yo soy la bruja de Maimón y estoy averiguando, es decir, investigando la desaparición de la bruja de Yásica. Han de saber que cuando una bruja desaparece le corresponde a aquella bruja más cercana en amistad el indagar lo sucedido para transmitir a las demás brujas la enseñanza correspondiente para que aprendan a sortear o evitar sufrir la misma experiencia. Ese, y no otro, es el motivo por el que estoy aquí. De manera que, por favor, permanezcan ustedes tranquilos que ningún daño les causaré a ustedes ni a los suyos. Y, por favor, escúchenme: la bruja de Yásica y yo nos saludábamos todas las mañanas con señales de humo negro  y su humo negro ha cesado de ser visto por mí desde hace unos cuatro meses.El cuervo que durante ese tiempo yo le enviaba a élla con mis mensajes escritos regresaba con dichos mensajes, a diferencia de antes; igualmente, el de élla no ha vuelto más a mi casa con los mensajes de élla, por lo que intuyo que algo le ocurrió y por eso estoy investigando.Sólo veo las señales de humo negro de la bruja de El Cupey, que me imagino que estará pensando igual que yo.Ahora sólo tengo comunicación con la bruja de El Cupey a través de nuestras señales de humo negro y de nuestros respectivos cuervos.Para iniciar mi investigación procedí a seguir la trayectoria por el aire de la bruja de Yásicadesde la última vez que me visitó y salió de mi casa y, en el trayecto, desde el aire sentí su olor sobre el techo de esta casa.Esas dos mangas de ratones ycucarachasque invadieron esta casa fueron enviados por mí para rastrear a ver si encontraban los despojos de élla, pues creí que ustedes pudieron haberla matado y escondido sus restos aquí. Tanto los ratones como las cucarachas tienen un súper olfato, de ahí que yo los seleccionara para esa tarea.Es decir, los ratones y las cucarachas por su olfato son infalibles para detectar rastros.El cuervo fue enviado por mí para que escuchara durante el día y la tarde todo lo que ustedes hablaban para que reprodujera todas las conversaciones de ustedes; y el búho lo envié de noche para que durante ella substituyera al cuervo para que captara todas las conversaciones y todo lo que ustedes expresaran durante la noche y me las reprodujera al irse con los primeros rayos del alba hacia mi casa en Maimón. Los ojos del cuervo eran mis ojos, pues todo lo que él veía lo veía yo; lo mismo los ojos del búho durante la noche. Uno substituía al otro llegado el término de su tiempo de vigilia y espionaje.Como los vigilantes míos no me entregaban ninguna información significativa y luego la introducción de las ratas y de las cucarachas fue frustrada decidí venir yo misma a indagar directamente sobre el terreno.

Tranquilizada la pareja por las palabras de la bruja de Maimón de que sus intenciones no eran hostiles, y, por ende, disipado el temor en torno al niño de cuatro meses que tuvieron como pareja y que estaba en la casa, el dueño de la casa le narró minuciosamente a la bruja de Maimón todo lo relacionado y acontecido a la bruja de Yásicaen ocasión del terror desde el techo que protagonizó desde el techo de dicha casa ubicada en la calle Imbert esquina calle Antera Mota, frente a la ferretería Canahuate, y al oir la bruja de Maimón la intervención del cura párroco y su agua bendita, dijo:

-¡Ah, ya entiendo, por eso es que yo no podía llevar mi investigación más allá de la presencia de élla aquí! ¡Con razón me estaba bloqueado todo! ¡Esa agua bendita nos bloquea a las brujas toda posibilidad de investigar! ¡Jamás íbamos a saber lo que pasó de no narrarnos ustedes lo que me acaban de narrar!

La Historia del origen de las tres brujas

-¿Y de dónde salieron ustedes como brujas?    -Le preguntó la esposa del dueño de la casa a la bruja de Maimón, la cual procedió a responderle:

-La bruja de Yásica era hija de un oficial francés y su esposa igualmente francesa que llegaron juntos cuando la ocupación francesa y que, al igual que otras parejas encabezadas por oficiales franceses, adquirieron tierras entre Cabarete y Yásica. El papá murió cuando los criollos enfrentaron a los franceses, es decir, como otras tantas francesas esposas de oficiales franceses quedaron viudas al morir sus esposos peleando en la batalla de Palo Hincado bajo el liderazgo de Louis Ferrand, quien en dicha batalla ganada por Juan Sánchez Ramírez, resultó vencido, procediendo Ferrand a suicidarse y su cabeza cercenada y exhibida por el sable de Pedro Santana padre (el padre de Pedro Santana Familia, el de las batallas contra los haitianos). La señora viuda francesa quedó propietaria de una gran cantidad de terrenos rico en árboles de caoba. La viuda hizo un trato de un préstamo con un comerciante de Santiago, éste la engañó y despojó a la viuda francesa de todas sus tierras. La hija, una niña, quedó desamparada, su corazón se endureció, el trauma de venganza la dominó, hizo un pacto con El Diablo a quien le pidió poderes a cambio de dedicar su vida a servirle. Esos poderes de bruja le permitieron materializar su venganza contra el comerciante santiaguero que estafó y expolió a su madre. La bruja de Yásica era la más joven de nosotras tres: por su juventud era una especie de campanilla dentro de nuestro grupo.

La bruja de El Cupey nació en mil setecientos doce (1712), es decir, mucho después de cuando Puerto de Plata había desaparecido devastada a manos de los propios españoles, bajo la gobernación de Osorio; élla es una descendiente de una de las familias de los que desacataron la orden de mudar la población hacia otro lado de la Isla y se escondieron detrás del Monte de Plata. Ya adulta iba a unirse con su novio, pero éste prefirió a la hermana de élla, con quien aquél la traicionaba. El odio hacia su ex novio y hacia su hermana la llevaron a apartarse de aquel grupo de personas, se aisló y vivió en una cueva donde contrajo el compromiso con El Diablo de consagrarse a él para siempre a cambio de poderes para vengarse y para sobrevivir en base a ellos, cosas que efectivamente logró.Los colonos españoles que desde mil setecientos treinta y cinco empezaron a llegar a Puerto de Plata procedentes de las Islas Canarias y parte de los cuales que intentaron aposentarse próximo a El Cupey fueron víctimas de la saña de élla y por eso, atemorizados, desistieron de vivir en esos alrededores y se fueron hacia otros lugares alejados.

Yo soy la bruja más vieja de las tres: soy descendiente de una pareja de esclavosnegros que se escaparon de un ingenio de azúcar que había a orillas del río San Marcos, cuando permanecía la intención de que Puerto de Plata fuese un sugartown; mis padres fueron de los primeros negros esclavos en llegar a Puerto de Plata para substituir la mano de obra indígena; una noche lograron burlar la vigilancia y escaparon conmigo en brazos, querían un mejor destino para mí; tratando de evitar poder ser encontrados caminaron y caminaron siempre hacia el Oeste entre las montañas hasta llegar a Maimón, donde vivieron ocultos a la falda de la lomita más alta, lugar que eligieron para subir a esta por el lado Oeste y divisar desde lejos si alguien podía aproximarse desde el Este; ahí me criaron y me enseñaron lo que era la brujería, pues mi padre era un sacerdote brujo de la tribu africana a la que pertenecía; mi madre igualmente era una sacerdotisa bruja de otra tribu africana. El odio de ellos dos fue mi odio. Ese es el origen de nuestra respectiva condición de brujas de las tres. …Bueno, creo que el tiempo que le he hecho perder es más que suficiente, gracias por la atención y las informaciones que me han brindado, tengo que irme.

Los tres se despidieron amablemente. Tras la bruja de Maimón orientar sus pasos caminando hacia el Oeste por la calle Antera Mota, la misma desapareció a la vista de la pareja que la estaba viendo desde la esquina formada por la calle Imbert con la calle Antera Mota.