Por Luis Henríquez Canela
Sin lugar a dudas que para Puerto Plata ha sido un logro sin precedentes el acondicionamiento de las calles del Centro Histórico y la conservación del patrimonio. Casas de estilo neoclásico y victoriano de finales del siglo XIX mantenidas en base a mucho esfuerzo.
Una gran parte de esas construcciones las han convertido en restaurantes, bares y tiendas cuya función principal es servir a turistas, residentes y visitantes.
La inversión cuantiosa en el acondicionamiento de las calles y aceras, incluidos los desagües, adoquines, señalizaciones, pilotillos, le cambiaron la fisonomía a un área que lucía abandonada.
Aun con todas esas bondades, las autoridades no tomaron en consideración los parqueos. Ni siquiera a los mismos residentes del lugar le dejaron espacios para estacionar sus propios vehículos.
Una tesis a tomar en cuenta para solucionar la situación podría ser, utilizar el edificio donde se alojaba el antiguo palacio de justicia, ubicado en la esquina formada por la calle Separación y la calle Beller, para construir un parqueo público de varios niveles. Eso permitiría la dinamización comercial del Centro Histórico.
Desde hace varios años el Ministerio de Cultura inició los trabajos de remodelación de la Escuela de Bellas Artes en ese mismo lugar, sin embargo, hay otros lugares donde puede instalarse esa dependencia estatal, incluyendo la puntilla del malecón, donde hay un edificio abandonado que bien se presta para Cultura.
Si no se le busca una solución a los parqueos, el comercio en esa localidad seguirá su frágil rumbo.