PUERTO PLATA.-El problema del tránsito continúa siendo uno de los grandes retos que tienen las nuevas autoridades del ayuntamiento, afirmó el presidente de la Asociación de Hoteles del Norte (Ashonorte), doctor José Natalio Redondo Galán.
“No le echen la culpa a la Amet. Perdónenme, pero no le echen la culpa a la Amet. No ha habido una posición firme ni un apoyo real del dueño de la casa, que es el ayuntamiento. No lo ha habido, tiene que haberlo ya”, demandó.
Redondo Galán dijo al comparecer al programa “Sin Límites” que emite los domingos Musa Visión, canal 10, que “aquí hay que dejarse de continuar posponiendo la solución de ese problema y hay que entrarle a dos manos”.
“¿Cómo se debe comenzar? Lo hemos dicho todos, con la organización del motoconcho, comenzando poco a poco”, planteó el plrofesional de la medicina al ser entrevistado por el periodista Manuel Gilbert en el citado espacio televisivo.
Aclaró que no tiene nada en contra de los motoconchistas y para avalar su posición sobre el motoconcho, recordó que frente a la Centro Médico Bournigal propiedad de su familia existe una parada de mototaxistas y no hay ningún problema, porque hay control.
“El problema del motoconcho radica, precisamente, en que no hay control por parte de las autoridades del cabildo, las cuales deben entender que cuando emiten un carnet de motoconcho a una persona, le están dando un privilegio”, señaló.
Agregó que ese carnet no es producto del derecho al trabajo del que lo recibe, sino, reiteró, es un privilegio, que no se le está dando a otros que lo quieren.
“Ese grupo de motoristas que son privilegiados con el carnet que le da el ayuntamiento tienen que cumplir la ley y hacerle saber que primero que derechos, tienen deberes y por esa razón no se le puede permitir que violen los semáforos y las señalas de tránsito”, abogó.
Sostuvo que el mal que representa el motoconcho ha crecido, debido a que las autoridades han aplicado un método errado para controlar los motoconchistas, enfrentándolos en su totalidad, lo cual es imposible”.
“Se debe comenzar estableciendo anillos. Se debe colocar un anillo y trabajarlo y dentro de tres meses se amplía el anillo y así sucesivamente, hasta que se establezca un espacio amplio de la ciudad, donde se prohíba la operación del motoconcho”, sugirió Redondo Galán.