Manuel Gilbert
PUERTO PLATA.-El Director General de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Puerto Plata (Coraapplata), ingeniero José Onésimo Reyes, rebatió la inexactitud expresada por el ingeniero Miguel Ángel Jiménez Messón en el sentido de que en Puerto Plata no se necesita construir un nuevo acueducto para resolver el déficit de agua que sufre, el cual asciende en la actualidad entre 300 a 500 litros diarios.
El titular de Coraapplata dijo que escuchó en un programa televisivo y radial a Jiménez Messón expresar que se había reunido con el ingeniero Mario Emilio Almonte, hijo del fallecido ingeniero Emilio Almonte, quien le manifestó que en Puerto Plata no requiere un nuevo acueducto, sino, simplemente, colocar en la obra de toma acueducto en Madre Vieja, Sosúa, algunos equipos y tuberías y hacer otra planta de tratamiento.
“Se atrevió a decir que no hay necesidad de construir un nuevo sistema de agua potable y que los que promueven la ejecución de ese proyecto tan necesario, solo los mueve el interés y el vicio de buscarse un dinero, porque en la obra de toma hay suficiente agua para resolverle el problema a Puerto Plata”, expresó el ingeniero Reyes en su réplica al también ex senador, que hoy funge como comentarista y analista en un medio local.
Deploró el hecho de que el ex ministro de Obras Pública trate de impugnar la validez del proyecto que impulsa la dependencia que dirige para que el gobierno construya otro gran sistema de abastecimiento de agua, que beneficiaría no solo a Puerto Plata, sino también a los distritos municipales de Sabaneta de Yásica y Cabarete; así como a los municipios de Sosúa, Montellano y al distrito municipal de Maimón.
Informó que ha participado directa o indirectamente en todo lo relacionado con la construcción o diseño de todos los sistemas de agua potable y sanitario que se han planificado, realizado y puestos en operación en toda esta provincia norteña, excepto en los que se hicieron antes o en el año 1970, en el que tomó parte el ex director general de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Puerto Plata (Coraapplata) ingeniero Diógenes Vargas.
Explicó que el también ex asesor del Consejo Directivo de la Corporación de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) insistía de manera reiterada que en el río Yásica, la que definió como la fuente más grande que tiene el sistema de abastecimiento de agua que tiene Puerto Plata se podía construir otro sistema paralelo, porque se había dejado todas las facilidades e instalaciones para, en caso necesario, ampliarlo.
“Eso no es correcto. Eso no es así, lo que tenemos ahora mismo, solo está diseñado para producir un metro y medio por segundo. La obra de toma está en el punto central del río Yásica, entre el punto donde nace en Pedro García, hasta donde termina en el Océano Atlántico en Sabaneta de Yásica y allí tenemos un promedio de siete a doce metros cúbicos de agua, cuando dicho río está en su mejor momento”, señaló.
El ingeniero José Onésimo Reyes, acotó que “sí solo se le sacará un metro, el ingeniero Jiménez Messón tuviera la razón, cuando afirma que se puede ampliar el acueducto ahí mismo y extraer el metro y pico que nos hace falta para los próximos 20 años, pero, lamentablemente, no es así, porque hemos comprobado que hay períodos de estiaje, durante los cuales el río ha bajado su caudal hasta 1.7 y a 1.3 metros cúbicos, que sumado al metro que le sacamos, quedarían 300 litros”.
“Tenemos videos y fotos que se los podemos presentar, donde el cauce está seco y prácticamente no tiene agua. Imagínese, que se le quiera sacar un metro más, llegará un momento en que toda la infraestructura que se construyera para San Felipe de Puerto Plata estaría de más, convirtiéndose en un elefante blanco y el mismo ingeniero Chío Jiménez nos preguntaría, por qué hicimos eso ahí”, argumentó el funcionario público.
Reafirmó que no es una ampliación del acueducto de Puerto Plata lo que se necesita construir, sino un gran sistema de abastecimiento de agua que abarcaría también a los usuarios del sector turístico, a los residenciales, comerciales e industriales de las comunidades de Veragua, Sabaneta, Cabarete, Sosúa, Montellano, Puerto Plata y Maimón, litoral que representa prácticamente todo lo que es la zona norte de República Dominicana.
Reveló que en estos momentos se están haciendo los estudios finales de ese gran acueducto para tratar de lograr que el gobierno lo asuma y aporte los fondos necesarios para iniciar su construcción, ya que representa la solución definitiva para los próximos 20 años, que comenzarían a contarse, precisamente, en el presenta año 2016, como lo han hecho sus antecesores en la dirección del organismo que dirige.
Haciendo un recuento de los acueductos construidos, estableció que el primero que se construyó fue “El Violón”, en 1901; seguido por “El Saltadero”, en 1920; el de “Bella Vista”, Sosúa, en 1940; en 1974 se amplió ese acueducto, para que, además de Sosúa, se pudiera suministrar agua a la comunidad de Puerto Plata y en el año 1994, se construyó el gran acueducto de Puerto Plata, que ya cumplió su vida útil, porque tiene más de 20 años operando.
Puntualizó que para el 2014 “teníamos que prepararnos para los próximos 20 años y siendo Juan Carlos Morales presidente del Consejo Directivo y nosotros el Director General de Coraapplata, comenzamos a hacer los estudios para gestionar la ejecución de un nuevo acueducto, porque ya el sistema comenzaba a dar muestras de debilidades para poder abastecer a la población de Puerto Plata, la cual había crecido más de lo proyectado”.
“Puerto Plata, es bueno que sepamos todos los puertoplateños, tiene una carga poblacional fija, conformada por los residentes permanentes y otra, constituida, por los turistas extranjeros y los nacionales, que es muy variable, como se puede comprobar algunos fines de semanas, en los que afluyen tanta gente que nos sentimos sorprendidos de la inmensa cantidad de población flotante que se registra”, subrayó.
Explicó que en los recorridos que ha hecho en los últimos meses por Cabarete y Sosúa ha podido ver que grandes proyectos que estaban paralizados y apagados en dicha zona turística han sido reiniciados y otros han sido comenzados por sus promotores, lo que representará una demanda mayor sustancial para los momentos actuales y también para los próximos 20 años, período durante el que se espera un repunte extraordinario del destino Puerto Plata, volviendo a ser un lugar atractivo para la inmigración interna y externa.