El ardiente deseo de justicia que se manifiesta a través de las marchas verdes hace multiplicar los trabajos, tal vez la “pinchadera” de teléfonos, la vigilancia más de cerca, reporteros y camarógrafos hacen sus reportes en horas de la noche tras esperar que salgan los “invitados” desde la Procuraduría.
Se acuestan más tarde y se levantan más temprano funcionarios y ex funcionarios. Legisladores y ex legisladores, porque tienen que esperar las últimas noticias o lo que se dice en las redes sociales.
Unos acuden a la procuraduría “sin ser invitados”….luego se conoce que fueron llamados.
Los brujos y espiritistas, leedores de tazas,botellas, barajas, palma de las manos y hasta de los pies hacen su agosto en mayo con cráneo de muerto o sin él. Hay muchas consultas. Hoy es martes.
El caiga quien caiga se hace repetitivo. Los intérpretes hacen su trabajo hasta en horas inusuales. Igual hacen quienes preparan los expedientes. Estos, más exhaustivos para no dejar cabos sueltos ya que “el mejor amigo de la impunidad es un expediente mal elaborado”.
Mientras el presidente Temer en Brasil baila en la cuerda floja, contra el ex mandatario de Panamá Alberto Martinelli, se emite alerta roja –debe ser un huracán- para apresarlo donde quiera esté, Alejandro Toledo ex presidente de Perú, no aparece ni en misa como muchos que ahora aspiran a un encuentro con lo Divino.
Conforme a lo señalado recientemente por el presidente de la Cámara de Cuentas de la República Dominicana Hugo Alvarez Pérez, cuando dijo “es necesario que se adopten como norma los tres pilares de una verdadera democracia: supremacía de la Constitución y las leyes: el segundo la transparencia y el tercero, crear una cultura de rendición de cuentas”
Ante una sociedad dominicana demandante y en constante despertar contra la corrupción e impunidad, parece que se soltó el loco.
El loco, loco al fin, no repara en colores de partido, ni rangos, ni posiciones que hayan ocupado, ni en cuales años fue por aquello de que la Ley es la ley!