SANTO DOMINGO. Las imputaciones que hizo el Ministerio Público contra los 14 sometidos por recibir sobornos de parte de Odebrecht, tendrán que sustentarse en nuevas colaboraciones y pruebas para que puedan sustentarse durante la fase de instrucción del expediente.
Ello porque, a juicio de algunos abogados, las pruebas presentadas y ventiladas durante el conocimiento de la medida de coerción que se le conoció a los imputados, no serán suficientes para que la acusación logre mantenerse.
En ello coinciden los juristas Félix Damián Olivares y Cándido Simón, quienes cuestionan las fallas que –entienden- ha tenido el Ministerio Público.
Olivares reconoce que, hasta ahora, se ha conocido la coerción, que como etapa inicial no requiere de todos los elementos, pero dice que, en lo adelante, los fiscales tendrán que hacer un buen trabajo de investigación y análisis.
“Para el nivel de exigencia de esta fase (la coerción), pudiera, en relación a algunos de los imputados, haber elementos suficientes para encartarlos, pero no otros, respecto de los cuales, las alegaciones no están circunstanciadas por ninguna información objetiva que permita establecer un cuadro fáctico de soborno”, plantea.
Indica que las declaraciones de los delatores en Brasil, en las que se apoyó la Procuraduría para hacer su solicitud de coerción, no señalan de manera directa que algunos imputados hayan recibido pagos indebidos, y que la sola mención no es suficiente para establecer que se produjo un pago, y que el intermediario entregó el dinero.
El abogado considera que el procurador Jean Alain Rodríguez deberá conseguir cooperación de algunas personas que le permita establecer el circuito de capitales y testaferros de los imputados. “Si eso no se da, es difícil que el caso se sostenga, se puede caer”.
Cándido Simón también entiende que el Ministerio Público tendrá que avanzar más para tener causa probable, “porque lo presentado hasta ahora no representa medio sustentable”.
Señala como falencia el que no haya un anticipo de prueba llevando a los delatores de Brasil que estaban en el país, ante un juez de instrucción.
“El testimonio no se incorpora al expediente, sino el testigo. El testimonio sólo se puede incorporar bajo anticipo de pruebas. Entonces, eso es un punto débil que tiene, a menos que los testimonios sean corroborados. En ese caso, tendrían que poner a los delatores a testificar, sea vía teleconferencia o que vengan al país. Si eso no se logra, no hay caso”, reflexiona Simón.