Por Manuel Gilbert
ISABELA HISTÓRICA.-Era para Cristóbal Colón sitio funesto, azaroso y desgraciado aquel dónde estuvo El Fuerte de la Navidad y se dedicó a la búsqueda de otro punto más apropiado para el establecimiento de la colonia, a este fin, ordena al capitán Melchor Maldonado recorrer la costa al mando de trescientos hombres”.
Maldonado reconoció la boca del Río Yaque y luego Bayajá, regresando sin haber encontrado un lugar que reunirse las condiciones necesarias: piedras de construcción, materiales y elementos naturales indispensables.
El 7 de diciembre parte Colón con toda la Armada en busca del nuevo asiento de la colonia, que él prefería que fuese del Cibao. Se dirige hacia el Este, pero vientos contrarios le impiden llegar más allá del Puerto de Gracia, que considera inapropiado. Retrocede 3 leguas y el 2 de enero de 1494 con mal tiempo y la tripulación impaciente, escoge un lugar cerca de la desembocadura del Río Bajabonico.
Colón saltó a tierra en un pueblo de indios que allí había y luego mandó a desembarcar toda la gente que venía muy cansada y fatigada y los caballos habían perdido bastimento y otras cosas de la Armada, lo cual todo mandó a poner en un llano, que estaba junto a una peña bien aparejada para edificar en ella su fortaleza.
En este hermoso lugar, establece el regocijado genovés la primera villa cristiana, la Primera Ciudad del Nuevo Mundo que. en honor a la Reyna de España, bautiza con el nombre de La Isabela. El propio Almirante puso gran diligencia en todos los detalles. relativo a la edificación de la histórica villa; ordenó las calles y la plaza, la edificación de casa para los bastimentos y municiones, para una iglesia y para un hospital.
Mandó que cada cual construye su vivienda como mejor pudiese y al poco tiempo de desembarcar construyeron doscientas casitas o cabañas pequeñas. Tanto ardor pusieron los conquistadores en su trabajo, que el 6 de enero de 1494 se celebró misa solemne en la pequeña iglesia, ubicada al lado de un Guayacán, con la participación de trece eclesiásticos, encabezados por el Vicario Apostólico Fray Bernardo Boyl, secundado por trece sacerdotes.
La eucaristía realizada el pasado 6 de enero, para conmemorar el día de la Epifania y la Primera Misa realizada en el Nuevo Mundo hace 529 años fue presidida por el obispo Julio César Corniel Amaro, secundado por más de 20 sacerdotes, diáconos y seminaristas y tuvo como escenario el Templo de las Américas.