Manuel Gilbert
PUERTO PLATA.-La Asociación de Ganaderos Puerto Plata Central agasajó a sus miembros e invitados la noche del pasado jueves con una cena bailable en el Club de Empleados Andrés Brugal Montané de la Casa Brugal.
La actividad se inició con la música contagiosa de Antonio Howard y la Banda Clásica, que desde que se escuchó el primer merengue convocó a la pista a parejas de bailadores que disfrutaron de los ritmos variados que interpreta la agrupación.
Después del primer largo momento musical, se produjo una pausa que dio paso a las palabras del presidente de la organización anfitriona, ganadero Bienvenido Ripoll, quien luego de saludar a todos los presentes les deseó feliz navidad y próspero año nuevo.
“Como siempre esta con nosotros esta noche el obispo Julio Cesar Corniel Amaro, el cual siempre nos acompaña en todas nuestras actividades, quien con sus oraciones nos hace sentir más cerca de Dios”, expresó el productor pecuario.
En ese sentido, Ripoll recordó los ruegos que el prelado católico elevó sus ruegos al cielo para que lloviera en ocasión de la aguda y prolongada que devastó sus fincas y el Altísimo atendió sus clamores y llegaron las lluvias que salvaron sus ganados.
Recordó que una ocasión Corniel Amaro le dijo: “lo que bien comienza, bien termina” y “nosotros comprobamos este año que es así, porque iniciamos bien el 2014 y estamos terminando este año con este gran encuentro de fraternidad y convivencia”.
Luego de su breve exposición, Alejandro Ripoll dio paso a monseñor Julio Cesar Corniel Amaro que al bendecir el encuentro y la cena navideña, destacó el significado de la navidad, celebración que afirmó es sinónimo de amor, solidaridad y paz.
“Dios bendiga esta noche. Dios bendiga a los ganaderos, Dios bendiga a sus familias y Dios bendiga los alimentos que vamos a comer. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén”, concluyó diciendo al máximo representante de la Iglesia Católica en Puerto Plata.