Manuel Gilbert
PUERTO PLATA.-La Catedral San Felipe Apóstol será uno de los lugares más frecuentados por cruceritas que visitarán el centro histórico de Puerto Plata a partir del 6 de octubre, fecha pautada para la llegada del “Victory”, el primer crucero que tocará la moderna terminal marítima de Maimón.
Como se recordará ese recinto católico había sido objeto de una reparación grande para retañar la secuela de daños que le ocasionó el terremoto de 6.5 grados en la escala de Richter que sacudió a Puerto Plata el 22 de septiembre del año 2003.
La Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado sometió en el año 2006 a una remodelación más amplia el principal templo de la Diócesis Gaspar Hernández, Joba Arriba, Jamao al Norte, Pedro García y Puerto Plata, dejando esa edificación prácticamente nueva.
Han transcurrido nueve años desde que se llevó a cabo la nueva intervención y desde entonces a su pintura no se le ha dado un retoque y muchas de sus paredes están descascaradas, presentando un aspecto poco atractivo al que le eche un vistazo para contemplar su magnificencia.
Debido a vicios de construcción y al hecho de adolescentes irreverentes pocos reflexivos la parte superior de los muros de los terraplenes laterales situados a ambos lados de la escalinata localizadas en el lado sur del santuario principal de Puerto Plata han sufrido desprendimientos.
Asimismo, a tres escalones de la mencionada escalinata han perdido algunos de sus mosaicos y también presentan un aspecto poco estético a la vista por lo que es imperioso e impostergable que se proceda a reponerlos cuanto antes.
El feo aspecto que presenta la principal Casa de Dios en la novia del Atlántico solo se explica por el hecho de que Puerto Plata cuenta con un manso pastor, poco dado al reclamo agrio y persistente y por eso ninguna autoridad se preocupa por corregir los problemas de la Catedral.
Mientras existe indiferencia total para resolver la referida problemática, las autoridades invierten RD$541 millones en la construcción del parque y el anfiteatro de la puntilla del malecón y en la revitalización del centro histórico, no tienen en sus planes devolverle su esplendor a la Catedral San Felipe Apóstol.
No es que critica los RD$252.0 millones que se invierten en el parque y el anfiteatro ni los RD$289.0 millones que se destinan a la remodelación del centro histórico. No, lo que se cuestiona es que no se invierta nada en pintar y reparar la iglesia suprema se la feligresía católica.
Es oportuno señalar que la Catedral San Felipe Apóstol no es solo importante por su principalía dentro del catolicismo provincial, sino porque es, junto con el Solar de las Américas de la Isabela Histórica, la Fortaleza Colonial San Felipe y la Ciudadela del General Gregorio Luperón, uno de los cuatro monumentos más importantes con que cuenta el destino turístico de Puerto Plata.
Por las dos razones de importancia que representa dicho templo para la grey católica y como atractivo turístico las autoridades tienen que cuidarlo de manera permanente y no tener que esperar que sufra un gran deterioro para entonces tener que invertir una suma millonaria.