Primera parte….

PUERTO PLATA.-El teleférico luce mejor que cuando se inauguró hace 47 años, gracias a los cambios impulsados por la Administración y el Patronato con el respaldo del presidente Luís Abinader y el ministro de Turismo David Collado.
Los cambios hechos durante la joven gestión de Atahualpa Paulino se palpan tan pronto se traspone la puerta que sirve de umbral a la base principal de donde parte y arriba el funicular inaugurado en el año 1975, por iniciativa del doctor Joaquín Balaguer.
Paulino fue nombrado en el cargo en lugar de Alexis Merette el 9 de junio del 2021, dieciséis días después de ocurrir la avería que mantuvo fuera de servicio el medio de transporte a la cima de la montaña Isabel de Torres durante varios meses, ocasionando pérdidas millonarias no cuantificadas.
Desde su llegada a la dirección a esta maravillosa oferta turística complementaria el nuevo gerente se dedicó a ejecutar la renovación más grande que se ha ejecutado en los casi cincuenta años de servicio del teleférico de la Novia del Atlántico.
Durante su gestión de casi un año y el apoyo del ministro Collado se reparó la polea averiada, se renovó la estructura física de la base, se pintó y señalizó su parqueo, se dotó las cabinas de pasajeros de un nuevo sistema de peso, lo que aumentó los niveles de seguridad para los usuarios del funicular.
De igual manera, se decoró con hermosos cuadros el corredor de acceso a la parte posterior de la base de llegada y retorno de los usuarios de esta fantástica facilidad tan demandada y valorada por los visitantes nativos y extranjeros.
Asimismo, la estructura que simula una cabina donde se retratan muchos de los usuarios de este maravilloso servicio fue rehabilitada y la jardinería se incrementó la cantidad de plantas ornamentales y florales, por lo que en la actualidad hay 686 árboles de distintas especies.
El domo del Cristo fue retocado con pintura blanca, resaltando más esta escultura gigante, se reordenaron los 19 espacios de las tiendas que funcionan allí, se movió la caseta de expendio de bebidas y snack de la parte superior a un espacio de la parte baja, para ofrecer una mejor panorámica.
También se pintó y señalizó el parqueo situado entre la referida caseta y el restaurante que opera desde hace 23 años doña Maura Mena, el cual se conserva en óptima condición dando un servicio de primera y una gastronomía de primera para deleite de los que lo visitan.