57588239_10217015417889119_3334472433766760448_nPor Manuel Gilbert
PUERTO PLATA.-La sociedad puertoplateña está triste y consternada por la muerte de tres mujeres excepcionales que se distinguieron como promotora cultural y como educadoras.
Se trata de doña Lilian Russo de Cueto, histórica líder de la Sociedad Cultural Renovación, institución desde la cual dirigió grandes acciones en favor de la cultura.
Russo de Cueto fue compañera de estudios en La Vega de la heroína Minerva Mirabal y siempre mantuvo luchando por la democracia, al lado de su esposo Fernando Cueto.
339063588_1430136504463294_8827404909263769169_nAmbos fueron luchadores antitrujillistas y grandes batalladores por la consolidación y mantenimiento de la democracia, en favor de la cual libraron grandes combates.
Por ese motivo, la patria pierde a una de su estandartes más importantes en la provincia de Puerto Plata, la cual la acogió con afecto y calidez, como una hija propia.
La educadora Carmen Araujo, se destacó en el campo educativo, sector que tuvo el honor de dirigir desde la Regional 11 de Educación, realizando una encomiable labor.
Formó parte de la plantilla de catedráticos destacados de la Universidad Tecnológica de Santiago, Recinto Puerto Plata, donde sus servicios fueron muy bien aquilatados.
339095126_148974118105764_2890943758798594139_nAsimismo, la pérdida de la profesora de nivel secundario, Ana Hilda Salvador, también constituye un duro golpe y una baja sensible para el sector nodal de la Educación local.
Su entrega al sacerdocio de la enseñanza y su efusividad, la hicieron acreedora a modo de merecida retribución de un inmenso de sus alumnos y sus compañeros de oficio.
Las tres son merecedoras de que Puerto Plata les tribute una despedida a la altura de su consagración a la difusión de la cultura y la educación, dos valores trascendentales para su sociedad.