El huracán Irma se debilitó el viernes para convertirse en una tormenta de categoría 4 mientras avanzaba por el Caribe camino de Florida, aunque seguía siendo un poderoso huracán.
Los vientos máximos sostenidos de Irma remitieron a cerca de 250 kilómetros (155 millas) por hora, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. La agencia veía probables más variaciones en la fuerza del meteoro durante uno o dos días, pero esperaba que conservara la categoría 4.
Justo antes de las 5 de la madrugada del viernes, el huracán tenía su centro unos 90 kilómetros (55 millas) al noroeste de la isla de Great Inagua y 795 km (495 millas) al sureste de Miami.