VILLA ISABELA, Luperón.-Con una Eucaristía presidida por Monseñor Ghaleb Moussa Abdallah Bader, Nuncio en el país de su Santidad el Papa Francisco, la cual fue oficiada en la mañana del sábado fue conmemorado el 524 Aniversario de la Primera Misa celebrada en el Nuevo Mundo el 6 de enero del año 1494.
La misa realizada en el Santuario Jesucristo Evangelizador de la Isabela Histórica, tuvo como co-oficiantes a obispos de Puerto Plata e Higuey Julio Cesar Corniel Amaro y Nicanor Peña Rodríguez, así como sacerdotes y diáconos de las parroquias de la diócesis Gaspar Hernández, Joba Arriba, Jamao al Norte y Pedro García.
El acto litúrgico contó con la presencia del gobernador provincial, doctor Iván Rivera; los diputados Juan Carlos Quiñones, Ginette Bournigal y Graciela Fermín Noesí, así como el alcalde de Luperón, Israel Brito y los ex legisladores, ingeniero Adalberto (Cley) Brito y Fiordaliza Estévez y se inició a las 10:00 de la mañana con un desfile de los religiosos.
Los émulos del padre Bernardo Boyld y los demás sacerdotes que tuvieron el honor de concelebrar la Eucaristía que marcó el inicio de la Evangelización de la América descubierta por el Almirante Cristóbal Colón el 12 de octubre de 1492, partieron de la parte frontal del Templo de las Américas y concluyeron en el altar del recinto católico.
La bienvenida estuvo a cargo del Obispo Julio Cesar Corniel Amaro, quien expresó que “constituye un honor recibir al Nuncio Apostólico Ghaleb Moussa Abdallah Bader en estas tierras que fueron testigos de la celebración de la Primera Misa en el Nuevo Mundo. Esta es su diócesis, esta es su casa”.
Corniel Amaro agregó que también “expresamos nuestra alegría para también a Monseñor Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, quien ha venido desde Higuey, porque esto es parte de él, ya que en esta diócesis inició su episcopado en el año 1997, a quien le damos una cordial bienvenida, al igual que a las autoridades presentes”.
Del mismo modo, el principal jerarca de la Iglesia Católica en esta demarcación religiosa aprovechó su breve intervención para “saludar a nuestros fieles y delegaciones que han venido a conmemorar la Primera Eucaristía que marcó el inicio de la Evangelización en todo el Nuevo Mundo. Sean todos bienvenidos”.
Debido a la barrera idiomática, en lugar del Nuncio Abdallah Bader, homilía estuvo a cargo del Secretario de la Nunciatura, Monseñor Álvaro Izurieta, quien al explicar el motivo por el cual estaban congregados en el Templo de las Américas dijo que “lo hacemos para evaluar hacia dónde tenemos que ir y qué es lo que nos espera por delante”.
Aseveró que no fue por casualidad que hace tantos siglos atrás que se celebró en este lugar la Primera Eucaristía celebrado en el Nuevo Mundo, sino un mandato. En el segundo viaje de Cristóbal Colón venía con más gente a poblar y a establecerse. El Papa los envía con el mandato misionero de evangelizar que tienen todos los cristianos y que en aquel momento lo tenía el Padre Boyld con los demás sacerdotes y todos los que vinieron a esta tierra.
“Es una Primera Misa Misionera que viene a evangelizar y a traer el Evangelio y por eso nosotros la celebramos en este lugar. Para recomenzar esa misión, el Papa Francisco habla tantas veces de una Iglesia en salida, de una Iglesia misionera, de una Iglesia en la periferia”, manifestó Izurieta.
Expresó que en realidad el Santo Padre “nos recuerda, al vernos medio dormidos en la Evangelización y los recuerda lo que la Iglesia tantas veces ha hecho: Salir a misionar, porque una Iglesia que no sale, una Iglesia que se queda encerrada, es una Iglesia, como dice el Papa, que se va muriendo, es una fe que se va muriendo. Añadió que “si nuestra fe no sale hacia la vida de otros, hacia nuevos lugares, con el tiempo se va perdiendo”.