El cruel asesinato de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, un día como hoy, pero de 1960, durante la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, conmocionó a todos los países.
En una resolución del 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas, para honrar su memoria, designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que invita a todos los gobiernos, organizaciones internacionales y ONG, a realizar actividades que lleven conciencia sobre este tipo de crímenes.
Minerva y su esposo, Manolo Tavárez, fundaron el movimiento político 14 de Junio para luchar contra la dictadura. Como consecuencia, Tavárez Justo, Pedro González y Leandro Guzmán, estos últimos esposos de Patria y María Teresa, fueron apresados. Los esbirros de Trujillo planificaron la muerte a palos de las tres mujeres, que ocurrió cuando venían de regreso tras visitar a sus esposos.
El régimen presentó las muertes como parte de un accidente de tránsito, estrategia común que ya la población identificaba como crímenes del Jefe. Este fue el último de una serie de casos de barbarie del régimen truijillista que aceleró el ajusticiamiento del tirano. Los miembros del Servicio de Inteligencia Militar (SIM), que ejecutaron a las Mirabal y a su chofer, Rufino de la Cruz, fueron sentenciados por un tribunal a 20 y 30 años de prisión, pero nunca cumplieron sus condenas porque lograron salir de la cárcel con ayuda de militares trujillistas.