74643578_2443537225715349_7617752178861539328_nPUERTO PLATA.-La exhibición de pequeños, medianos y grandes árboles y elementos para su decoración en supermercados de la ciudad de Puerto Plata es señal inequívoca de la cercanía.

Con motivo de dicha hermosa festividad, el alcalde Walter Musa ha ordenado la remodelación de la hermosa glorieta victoriana y la colocación de un gigantesco árbol de navidad en la plaza Independencia.

Luego de concluir ambos trabajos, por instrucciones del Ejecutivo Municipal, se procederá a decorar el citado parque, escenario cada año del programa de animación del también llamado parque Central “Brilla Puerto Plata”.

El programa “Brilla Puerto Plata” incluye la colocación de bombillas de luces a colores, guirnaldas, un gran árbol navideño y un hermoso y deslumbrante pesebre.

Brilla Puerto Plata además de embellecer la de por sí bella plaza Independencia, trae consigo una descarga de música, principalmente navideña, como la interpretada por el conjunto Quisqueya y otras agrupaciones musicales de renombre.

Todo el ambiente impresionante y alegre que en los últimos años disfrutan en nuestra encantadora plaza Independencia es disfrutado en grande por maravillosos curiosos, que a diario se dan cita al corazón del Centro Histórico.

Todo lo descrito es un presente de la Alcaldía y el Concejo de Regidores del Ayuntamiento a los ciudadanos de Puerto Plata y a los turistas, dominicanos y extranjeros, que la visitan en horas del día y de la noche, especialmente.

En el umbral auspicioso de las pascuas abramos nuestros corazones y démosle un baño tierno amor a todos los que residen en este hermoso lar, habitado, primero, por aborígenes, luego por españoles,por negros traídos de África y finalmente, cuando se convirtió en destino turístico, por gente de gran parte del mundo, atraídos por su gran belleza y la amabilidad de sus mujeres y sus hombres .

Como dijo el Gran Almirante Cristóbal Colón el 11 de enero de 1493, Puerto Plata posee «la mejor y más bella tierra», expresión que constituye el primer elogio de un extranjero al Pueblito Encantado, como lo rebautizó luego Juan Lockward.