PUERTO PLATA.-Murió el pasado martes 13 de febrero en el Centro Cardiovascular de Santiago el destacado periodista puertoplateño Carlos Acevedo, quien sufrió un accidente cerebro vascular el pasado domingo mientras predicaba en la iglesia evangélica donde se congregaba.
Algunos de los hermanos cristianos presentes en el templo narraron que cuando Acevedo hacía su prédica se llevó la mano en la cabeza, comenzó a hablar de manera de modo incoherente y se desvaneció a causa de un desmayo.
Casi de inmediato lo condujeron presurosos a la emergencia de una clínica local, donde le hicieron una tomografía a su cerebro que detectó que el comunicador había sufrido un derrame cerebral masivo.
Pero, lamentablemente no fue intervenido por la falta de que apareciera alguien que depositara la suma de RD$100,000.00 que la clínica demandaba como condición para conducirlo al quirófano y operarlo, durando Carlos Acevedo 4 horas aproximadamente en la emergencia sin ser operado.
Lamentablemente en la clínica local no quisieron aceptar el seguro SENASA que era el que tenía el brillante periodista, el cual fue llevado en una ambulancia a la ciudad de Santiago al hospital Cabral y Báez, de donde fue referido al Centro Cardiovascular donde fue operado.
Acevedo, desgraciadamente, no volvió a despertar, sufriendo mientras estaba en la sala de cuidados intensivos de la referida clínica dos ataques cardíacos,del primero de los cuales los médicos lograron estabilizarlo, pero el último lo mató.
La muerte del periodista puertoplateño Carlos Acevedo enluta a los comunicadores de todo el país y muy especialmente a los comunicadores de toda la Región Norte .
Por más de 50 años , Carlos laboró en los principales periódicos nacionales destacándose siempre por mantener un periodismo objetivo y con una trayectoria diáfana e inquebrantable.
En su pueblo natal siempre se mantuvo activo dirigiendo periódicos ,revistas y en su haber se cuentan varias publicaciones de interesantes libros, el primero de los cuales fue “Mis cuadros jocosos”, que se encuentran en muchas de las librerias nacionales.
El periodista Carlos Acevedo, fue un ejemplo de humildad y un consagrado autodidacta amante de la lectura y tenía un gran dominio del discurso florido, una excelsa virtud que cultivó hasta su sentido fallecimiento.
Con la muerte del consagrado comunicador, pierde nuestro pueblo y el país un hombre sano, inteligente, solidario y desprendido. Un gigante de la dignidad y el decoro y un periodista talentoso de incuestionable honestidad