Ramiro Francisco
A mi esposa Silvia, mis hijas y nietos
Este 5 de Abril, es el Día Nacional del Periodista en la República Dominicana. Escucharemos y podremos leer los elogios, buenaventuras y defensa que se hace para esos “paladines defensores de la Democracia”.
Muchos no tienen reparo, para durante todo el año “meternos a todos en el mismo saco” de la adulonería, lambonismo, limpia imagen, huele fundillo y otros piropos degradantes para quienes abrazamos esta digna profesión.
Es posible que no todos lo hayamos experimentado, pero a veces uno se levanta como sin ánimo de no continuar con tan agudo pensamiento crítico en aras de construir una mejor sociedad digna de mejores autoridades y un futuro luminoso.
Si quienes pretendemos ejercer el periodismo con algún grado de dignidad, “tiramos la toalla” y dejamos que las dádivas y caramelos corrompan nuestro accionar, tendremos una sociedad más degradada e indiferente.
Observemos – si es que podemos – de dónde vienen esos elogios y el por qué y para qué de los mismos.
En estas próximas horas se toman y nos recuerdan los nombres de hombres y mujeres que se tienen como baluartes y referentes del buen ejercicio del periodismo, estén o no en esta dimensión de vida.
Y se toman sus nombres como luces, escudos y estandartes, por muchos que no han imitado ni imitan en nada su accionar en el ejercicio noble, honesto y pulcro del periodismo.
Para muchos de nosotros, el dinero está por encima del buen nombre y de la familia. Nos importa un ají Caribe lo que se diga de nuestro fraudulento accionar tras haber vendido nuestra honra si alguna vez la tuvimos.
Y en ese no importarnos nada, vendemos nuestra pluma y nuestro pensamiento para defender lo indefendible y tratar de limpiar imágenes manchadas de maldad y corrupción.
La sociedad Latinoamericana atraviesa por profundos y positivos procesos de cambios. En nuestro Caribe Insular, no somos la excepción.
El ejercicio responsable de quienes ejercemos el periodismo es un componente fundamental de esas transformaciones. ¿Cuál es nuestro aporte?
Lejos esté de nosotros exhortar a nadie a reflexionar este Día Nacional del Periodista, porque…no es asunto de un día.