PUERTO PLATA.-Una fuente que prefirió cobijarse con la sombra del anonimato informó ayer viernes que el bar-restaurante del anfiteatro no se ha construido debido a que mucha gente lo quería administrar para su propio beneficio.
El informante se abstuvo de revelar los nombres de los aspirantes que desean que le adjudiquen la administración de la referida facilidad, la cual es de vital importancia como complemento del referido espacio de presentaciones a punto de ser finalizado.
La no construcción del bar-restaurante acarrearía serios inconvenientes, ya que los que se den cita al anfiteatro no tendrán donde comprar bebidas espirituosas y gaseosas, así como bocadillos y otros tipos de alimentos.
Al conocerse el por qué no se postergó la remodelación del abandonado edificio que alojó el hospital construido durante la intervención militar de Estados Unidos a la República Dominicana, ha producido indignación y críticas ácidas.
Se ha comentado que el ministerio de Turismo ni el Comité Ejecutor de Infraestructuras en Zonas Turísticas (Ceiztur) debieron permitir que no se construyera esa obra complementaria, por el hecho de que en las cercanías no hay donde comprar ni bebidas, ni helados, ni comidas.
Como se recordará la empresa contratista que ejecuta los trabajos de construcción del parque y el anfiteatro de la puntilla ha dicho que entregará en 20 días esas obras, por lo que prácticamente no hay tiempo para construir el bar-restaurante.
Se desconoce, asimismo, la razón por la que tampoco se remodeló el edificio que alojará las oficinas de administración del parque y el anfiteatro, fallas que impedirán el disfrute pleno de ambas indispensables facilidades.
Otra falla del anfiteatro esta relacionada con los baños, los cuales estarán ubicados en el edificio que ocupan los camerinos de los artistas, por lo que los espectadores tendrán que caminar un buen trecho para hacer sus necesidades fisiológicas.
Esto obligaría, cuando la urgencia sea apremiante y las personas sepan que no podrán controlarla mientras recorren la distancia que existe entre el anfiteatro y los camerinos, que se decidan por defecar y orinar en lugares más cercanos a los asientos que ocupan.
Esto provocará una situación nauseabunda y molesta relacionada con la higiene, ya que se contaminará el área de los edificios donde operó la décimo cuarta compañía del Ejército República Dominicana y su entorno.
Como se ha dicho que el parque y el anfiteatro se entregarán el 30 del cursante mes de septiembre, en caso de que se decida subsanar los yerros cometidos, construyendo las referidas obras complementarias habrá que postergar la inauguración.
La gente se pregunta ¿Y que estaban haciendo las personas a las que se les está pagando para supervisar los trabajos que realiza la empresa constructora? ¿Por qué no se dio cuenta de esas fallas de bulto que están a la vista de todo el mundo?
No es justo que eso esté ocurriendo en un proyecto en el que Turismo a través del Ceiztur estaría invirtiendo conforme a lo revelado la suma de ¿RD$252.0 millones? Así que dada la necesidad imperiosa del bar-restaurante, la oficina administrativa y baños para el público ¡manos a la obra ya!