Ahora nos dicen, que hay que estar dentro de los partidos políticos, haber hecho vida política partidista, para saber y poder hablar sobre disciplina partidaria.Ahora nos quieren hacer creer, que esos disgustos, amargues, sinsabores y resentimientos que muestran algunos militantes y hasta fundadores del PLD, es algo muy normal entre hermanos llenos de pasiones.
Y nos dicen además, como para que lo asimilemos bien y “dejemos de ser pesimistas y voces agoreras del mal”, que hasta los hermanos pelean y son diferentes los dedos de las manos.
La aparente realidad es, que son muchos los que han abandonado el barco.
¡Claro que les han cantado el viejo son…”mientras menos perros menos pulgas….más fresco, menos calor”!
Pero…el “viejo zorro” solía decir, que en política se barre hacia adentro.
Un votante es necesario. ¡Cuánto más lo serán decenas, cientos, tal vez miles!
Dicen que son muchos los que se van del PLD. Otros llegan. ¿ Son más los que llegan, que aquellos que abandonan las filas del partido de la estrella amarilla?
¿Esos partidos que también han abandonado el Bloque Progresista, no significan nada?
¿Es acaso, parte de un teatro como cuando se retira el mar durante un terremoto, y luego vuelve poderoso y avasallante?
¿Cosecha el PLD lo que ha sembrado en otras organizaciones políticas? ¿Caos, incertidumbre, rencores, división, conflictos?
Los disgustos entre “corrientes alternas y corrientes directas”, ¿producirá el cortocircuito que provoque el fuego donde no valdrán las destrezas de los bomberos para contenerlo?
La vieja canción Qué Pasa Entre los Dos que interpreta el dominicano Camboy Estévez…”Qué pasa entre los dos, que cada vez nos entendemos menos, que cada día que termina es un fracaso amor” ¿La recibirían con agrado nuestros amigos del partido oficial?
No la recomendamos. Algunos son capaces de ponerles como corbata a los serenateros, la misma guitarra con que acompañan la canción.
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