razones-para-reir-masRamiro Francisco

Hay acciones que se realizan, en las que a veces damos muestra de acuerdo o desacuerdo. Otras no externamos opinión alguna, pero sonreímos “por dentro”, como cuando sabemos de una “pescozá” que alguien recibió por “pasao” o por intervenir sin haberlo llamado, en un pleito de “marío y mujer”.

Hace tan solo unos días, que un grupo de jóvenes lanzó heces fecal, al edificio que aloja a la Suprema Corte de Justicia. Esa acción, ha sido condenada por diferentes actores de nuestra sociedad y por igual, apoyada por otros.

Pero muchos en nuestra doble o tercera moral, criticamos acremente tal modalidad y nos sonreímos “por dentro”.

Cuando se da a conocer valoraciones realizadas a digamos: La Prensa, Diputados y Senadores, Partidos Políticos, La Iglesia y las Iglesias, el Poder Judicial, las instituciones militares y policiales, Salud Pública, Migración…muchas otras del 1 al 10, apenas les damos 2, 4 o 5 puntos, con todo y que en ellas hay hombres y mujeres valiosos, honestos y con una muy alta vocación de servicio.

Al lanzarles excremento, se tiene la creencia que pagan justos por pecadores.

Pero, de alguna manera tenemos que aprender las lecciones. Lecciones no aprendidas nos llevan a repetir el curso si no aprobamos los exámenes.

Desechamos ahondar en cuales artículos de la Constitución se violentaron. En eso, que nos ayuden los profesionales del Derecho. Aunque ya se habla de multas entre cinco a diez pesos.

Una vez, unos amigos le dijeron a C.M.T. alias Pompa, que estaba muy cargado de cuadros cuando se presentó a una fiesta sonera. Vestía camisa a cuadros, un saco a cuadros, la corbata muy ancha, era de cuadros, el sombrero ala corta, también a cuadros y bailaba con un cuadre como si quisiera hacerle honor a los cuadros que llevaba puesto.

Hay entidades, que no hay que lanzarles estiércol porque lo son en sentido general. Si lo hacen, se destacan como si tuvieran luces con destellos, visibles a varios kilómetros.

Es decir, heces sobre heces, estiércol sobre excremento, caca sobre pupu. Es el mismo nombre sólida o líquida. Cuadros sobre cuadros, como la vestimenta del viejo Pompa.

Tenemos buenos amigos “mierda” como le llamó el senador Prim Pujals, a un joven no hace mucho. Porque los “mierda” son aquellos que exigen, demandan, vigilan, salen a las calles, no son borregos, saben ponerse de acuerdo para alcanzar metas comunes y de interés al colectivo. Tienen mucha perspicacia y a veces, logran hacerse los pendejos.

Como son “mierda” tienen mucha afinidad con la mierda, y preparan las famosas Puputov, empleadas en Venezuela, dando además a conocer otra modalidad de lucha con el mismo material pero  en Argentina y Francia.

Nosotros conocemos el material, porque nuestros pies descalzos fueron presa de esas “bombas” dejadas en el suelo por los estrechos callejones,  donde teníamos que caminar en el día a día de nuestra niñez

Es más, andamos con ella en nuestros intestinos. Pero no como muchos, que la llevan dentro de lo que alguna vez fue su cerebro.

Puede ser que no estemos de acuerdo para decirlo públicamente con la acción realizada. En el fondo, hay cosquillas en el alma…y un guiño cómplice en el espíritu que nos hace sonreir.

ramiro_francisco@yahoo.com