Señores del gobierno, eviten otra injusticia como la cometida con los moradores de Kosovo.
Por Manuel Gilbert
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Todos están pensando en los millonarios beneficios que aportará a la economía de Puerto Plata la terminal de cruceros Taíno Bay que se espera que comience a recibir cruceros a finales del año 2020, pero pocos piensan en el destino de los moradores de los sectores Playa Oeste, Vía Férrea, Los Coquitos y Nuevo Renacer.
A pesar de que el presidente Danilo Medina dio el primer palazo a mediados del pasado mes de enero para dejar simbólicamente iniciados los trabajos de construcción de esa importante obra en la que se invertirán US$101.0 millones, el gobierno no ha dicho nada concreto sobre el destino de los pobladores de las citadas barriadas, localizadas al oeste del “muelle nuevo”.
Ninguna autoridad ha dicho cuál será la suerte de las personas que residen allí, las cuales tendrán, forzosamente, que ser reubicadas para que el espacio que ocupan sus viviendas ser utilizado para parqueos de vehículos y de las mercancías de las terminales de cargas y de pesca que se construirán en parte de su litoral marino con una inversión de US$25.0 millones..
Su amplio territorio también será destinado a la construcción de las oficinas de Aduana y de Autoridad Portuaria Dominicana (APORDOM), de las navieras que serán desalojadas, ya que tendrán que ceder los lugares que ocupan para a la compañía que construirá la terminal de cruceros levante allí parte de sus instalaciones.
Es oportuno recordar que los moradores del sector Kosovo fueron desalojados en el año 2015 y los dejaron como “pájaros sin nidos” y éstos se vieron compelidos a tener que ocupar un viejo edificio donde operó una plaza comercial que quebró y sus alrededores, donde se cobijaron bajo lonas para guarecerse, expuestos a las inclemencias del tiempo.
Allí han permanecido desde el mes de agosto del año 2015 hasta el sol de hoy, a la espera casi infinita de que el gobierno del presidente Danilo Medina, les termine de construir sus casas en el pequeño residencial que se está construyendo entre el cruce de las carreteras La Colorada-Imbert y el paraje La Grúa.
Para las autoridades fue fácil desalojar a los moradores de Kosovo utilizando un numeroso contingente policíaco-militar, que utilizando palas mecánicas destruyó sus humildes viviendas, dejándolos, prácticamente, desamparados, a la intemperie soportando sol, sereno, lluvias, enfermedades y hambre durante cuatro años.
¿Acaso se proponen cometer el mismo abuso de lesa humanidad en contra de la gente de Playa Oeste, utilizando la misma metodología inhumana para destruir sus casas y dejarlos a merced de la misma situación dolorosa que han tenido que soportar, estoicamente, los seres humanos que desalojaron de Kosovo y dejaron abandonados sin compasión ni piedad?
Creemos que para las autoridades no será tan fácil echar de sus hábitat a miles de familias y que cualquier intento de desalojo encontraría una fuerte oposición, por lo que el gobierno debe comenzar a buscar un lugar cercano para construirles sus viviendas a las personas que serán afectadas por el desalojo que obligatoriamente hay que llevar a cabo.
El centro de todo desarrollo propiciado por el Gobierno debe ser humano, hay que propiciar el progreso material, pero no solo en beneficio de un grupito, sino de todos. Vale decir, de la mayoría y de la minoría, para que haya justicia social, porque de no ser así estaremos ante otra injusticia más de las muchas que se cometen en República Dominicana.