PUERTO PLATA.-El gremialista Pablo Castillo demandó del Congreso Nacional y del Gobierno de Luís Abinader la creación de un organismo que controle de manera efectiva la especulación y el alza de los precios de los productos de la canasta familiar para que los magros salarios de los trabajadores les pueda alcanzar.Consideró como un abuso y una insensibilidad el aumento del salario mínimo de los empleados privados, después de durar siete años sin revisarlo, tiempo durante el cual el poder de compra de los sueldos se ha desvanecido y ya no les alcanza para cubrir sus necesidades y están sumido en la miseria más espantosa.
“El salario debe ser indexado cada dos años por el Gobierno y la Cúpula Empresarial como ordena la Ley, cosa que no se ha venido haciendo desde hace siete años, mientras el costo de la canasta familiar se ha elevado hasta el cielo, empujando al precipicio sin fondo de la pobrez”, señaló Castillo.
Denunció en el programa “Todo Incluido” que se difunde por el canal 10 de Musa Visión donde fue cuestionado el jueves pasado por Manuel Gilbert y Hugo Gómez que esta situación abusiva se corresponde con el modelo económico neoliberal que impera en República Dominicana desde la desaparición de Trujillo hasta el día de hoy.
“Esta cuestión del triste drama del salario mínimo no es privativo del gobierno de Luís Abinader, sino de todos los gobiernos y de todos los partidos gobernantes que han pasado por el poder que son neoliberales, que responden al sistema económico que existe en la República Dominicana”, indicó.
En ese sentido, acusó a Luís Abinader, a Leonel Fernández, a Hipòlito Mejía y Danilo Medina de responder a este modelo económico neoliberal y por eso de manera permanente se sufre la calamitosa situación de penurias generada por una paga salarial tan pírrica que “no alcanza ni para “la vela del alma” y solo da para morirse de hambre.
Denunció que el Gobierno y la clase patronal se burlan de los trabajadores públicos y privados manteniendo un magro salario, ya que el 77 por ciento de la población no devenga un salario de RD$30,000.00 y sumen en un estado carencial calamitoso que constituye una afrenta del peor tipo.
Pablo Castillo flageló en su exposición al liderazgo sindical que no se parece en nada al que tuvo como líderes a Mauricio Báez, a Barbarín Mojica, Ignacio Soto, Julio de Peña Valdez, Francisco Antonio Santos que con lucha perseverante sin claudicar ni rehuir el combate obtuvieron grandes Victorias para aliviar la pesarosa calidad de vida de la clase trabajadora.
“El salario tiene que ir acorde con el alto costo de la vida, no con un índice de precio que el Banco Central lo maquilla, sino a tono con el costo de la vida real. Empero, destacó que éste es un país donde sus gobernantes no le sirven a la mayoría de la sociedad, sino a los patronos que financian las campañas de los partidos y sus candidatos”, recalcó.