PUERTO PLATA.-El gerente de la Supervisión de la planta de tratamiento primario y el emisario submarino en proceso de construcción e instalación, ingeniero José Nazario Lora, explicó el papel que cumplirán ambas obras en el proceso de tratamiento de las aguas servidas para evitar que produzcan impactos negativos al medioambiente.
El profesional de la ingeniería civil con especialidad en el tema aguas potable y residual explicó que la referida planta de pre tratamiento, cuyo costo total y algunas obras complementarias que se han construido en su entorno está la valorada en cerca de RD$140.0 millones, está terminada en un 95%.
Nazario Lora dijo al ser cuestionado el lunes pasado en el programa “Todo Incluido” que se difunde de lunes a viernes por Musa Visión, canal 10, que el pre tratamiento consiste de las materias flotantes y sólidos de gran tamaño, como toallas sanitarias, cartones, papeles, trozos de maderas y otros objetos que puedan ser retirados por medio de rejillas.
El supervisor contratado por el Banco Mundial y el Proyecto de Agua y Saneamiento en Centros Turísticos (PASCT) precisó que durante el pre tratamiento se produce la separación de parte de la mayor parte de las grasas por medios de militamises en forma de tambor que retiran las partículas que tengan un tamaño superior a un milímetro y medio.
“Ahí hay una estructura muy interesante que consiste en dos canales paralelos con una entrada que es de hormigón armado donde se verterán las aguas que procederán de los diferentes sectores de la ciudad de Puerto Plata. En esa estructura se producirá una homogenización de los caudales de las aguas que serán conducidas a dos canales, uno en servicio y otro en espera”, expuso.
Informó que el operador combinará la forma de utilizarlos. Estableció que “en un canal tendremos un desarenador, un militamir de tambor para separar las grasas y los sólidos de pequeño tamaño y existe una estructura de salida que tiene un tramo de transición hasta lo que es la conexión con la parte terrestre del emisario submarino.
“Ahí es donde se produce el desbaste o pre tratamiento. En esa estructura se aplicará una parte del gas-cloro para bajar la concentración de las bacterias, ya que una condición sine qua non del emisario es recibir un nivel de coliformes, que son las bacterias que detectan la presencia de heces fecales en las aguas residuales”, manifestó.
Señaló que “ya con ese tratamiento, las aguas serán conducidas por la parte terrestre del emisario, que es una línea que tiene una longitud de alrededor de 344 metros de largo en una línea de polietileno, revestida y protegida con fibras de vidrio con un diámetro de 90 centímetros. Esa tubería tiene alrededor de 550 metros de largo con una unión de campana”.
Señaló que en cada campaña hay una junta de goma y entre las dos juntas de goma hay una válvula para inyectar la presión de prueba de cada tubería, la cual está concluida en un cien por ciento. Indicó que esa tubería fue elegida, sustituyendo a una de metal, debido a la estrechez de la calle del sector Nuevo Renacer que debía atravesar, porque el terreno es susceptible a derrumbes.