Por: MIGUEL ESPAILLAT GRULLON
Dedico este artículo a los miles de ciudadanos dominicanos silentes, que observan el panorama político, para después, en los próximos días, tomar la decisión de por quién votar. Dada mi militancia política, claro que los estoy invitando a que voten en contra de la reelección de Medina, y a favor del Partido con más posibilidades de triunfo, que es el PRM. El tema es amplio… de muchas aristas y difícil de condensar en un solo artículo; no obstante, en el trabajo expuesto más abajo- a mi modo de ver- presento las razones, para el convencimiento buscado, bajo el entendido, de que lógicamente, el PRM tiene un programa de gobierno, que contempla ampliamente, un proyecto de nación.
He aquí el artículo:
En unos de sus “cortitos” publicados en facebook, la talentosa Sara Pérez nos deja saber su criterio en torno a la reelección de Danilo Medina con el párrafo siguiente: “No son los dominicanos quienes mantendrían a Medina en el cargo; sino algunas condiciones a las que están sometidos los dominicanos: la ignorancia y la miseria de muchos y la imposición dictatorial de un grupito. Esas condiciones dificultan que los dominicanos – o cualquiera- expresen su voluntad y/o hasta se dispongan a reconocer lo que todos saben y a censurar lo inaceptable”.
Cierto, el hambre, la miseria, el analfabetismo, los vicios, la ignorancia, las desmedidas ambiciones personales, el periodismo vendido, la falta de patriotismo, la cobardía e indiferencia de muchos, la oposición fraccionada, la sumisión tradicional de varias clases vendidas al mejor postor, principalmente los comerciantes y los llamados intelectuales, son lacras, que en concilio repugnante, se han constituido en los principales factores y agentes del triunfo de las reelecciones, que para mal, han tenido lugar en nuestra República Dominicana desde los tiempos de su fundación en 1844. En este contexto, las justificaciones y métodos de Medina para reelegirse, no tienen ninguna diferencia con las justificaciones y métodos que en su época se valieron, para también reelegirse, Báez, Lilís, Horacio, Trujillo, Balaguer, Hipólito y Leonel Fernández. De esta historia cíclica, dan cuenta nuestros más serios historiadores y cientístas sociales, como el Dr. Francisco E Moscoso Puello, en su libro “Cartas a Evelina” y en muchos de sus escritos, Pedro Francisco Bonó, Ulises Francisco Espaillat, Juan Bosch y Andrés Luciano Mateo, entre otras ilustres personalidades.
La reelección, prima hermana de las dictaduras y de la imposición de álter egos, ha traído desgracias infinitas a nuestra patria, como si las mismas fueran portadoras de grotescos maleficios. Balaguer fue el alter ego de Trujillo, Hipólito lo quiso ser de ambos y no pudo, lográndolo Leonel. Ahora Medina, en ambicioso e inmoral proyecto personal, pretende ser el alter ego de Trujillo, de Balaguer y de Leonel. Los pesados maleficios que han acompañado a las reelecciones e imposiciones de los alter egos aludidos, no tienen porque ser la excepción en una supuesta reelección de Medina.
El mismo presidente Medina, premonitoriamente ha profetizado de manera clara y contundente, cuál será el destino del PLD, si osare transitar el camino de la reelección, cuando oponiéndose a la misma, rabiosa y categóricamente, predijo: “El PLD tiene que tener mucho cuidado de no imponer la reelección porque pudiéramos transitar un camino sumamente resbaladizo que nos llevará a perder el poder”.
Esta posición antirreleccionista, Medina la radicalizó con otras declaraciones al respecto, de las que cito las siguientes: “Yo solamente estaré cuatro años en el gobierno y ni un día más. Y no vuelvo tampoco con tiempo intercalado, y aunque hubiese existido la posibilidad de reelegirme, no lo haría, porque quien se lanza a buscar la reelección, tiene que tirar a un zafacón todos los escrúpulos y estar en capacidad de comerse un tiburón podrido, puesto que la reelección está prohibida en la República y es muy difícil que ningún presidente pueda conseguir los votos para modificar la Constitución, a menos que no se dedique a la inmoralidad de sobornar a los congresistas con millones sustraídos de los fondos públicos, que es dinero del pueblo, y yo, aunque existiese la posibilidad de hacerlo, eso no lo haría. Yo solo quiero cuatro años y nada más”; reafirmó Medina, más de una vez; ¿lo recuerdan?
Si votamos por Danilo, apoyamos a los corruptos y la continuidad de la corrupción
El pueblo no debe pasar por alto, que cuando votamos por Danilo, lo hacemos por una reelección, que como todas las efectuadas en esta media isla, será fatal para la economía y la democracia de la misma, por razones, paradójicamente señaladas por el mismo Danilo en su pose antirreleccionista, cuando sostenía: “la reelección se hace, usando y abusando de los recursos públicos y eso va a dañar el desempeño económico de la economía nacional”. Ciertamente, y como para cumplir con sus predicciones, Danilo ha estado abusando del uso de los recursos públicos a favor de su candidatura, lo que ya está generando un nuevo déficit fiscal en crecimiento, que de nuevo, se cubrirá con otra brutal reforma fiscal ya anunciada por el mismo presidente y su ministro de economía Temistocles Montas.
Además, en el escenario reeleccionista actual, tenemos que tener en cuenta, que votar por Danilo, es apoyar… consentir… aprobar… y hacernos cómplices, de que siga el robo de los recursos públicos por los funcionarios peledeistas (por aquello del perro huevero). Si votamos por Danilo Medina, consecuentemente, estamos votando por Felix Bautista, por Felix Rodríguez (exsindico de San Fco de Macorís), por Felix Cabrera (el hombre al que le han regalado el Hotel Montaña), por Euclides Gutiérrez Felix, por Victor Díaz Rúa, por Temistocles Montas y su familia, por los Fadul, por los Pared Pérez, por Felucho Jiménez, por todos los jueces de las Altas Cortes, por el flamante Francisco Javier García, por Radhamés Segura, por Radhames Jiménez, por Radhamés Zorrilla Ozuna, por Carlos Amarante Baret, por Miguel Soto, por Amable Aristy Castro, Jiménez, por Cesar Pina Toribio , por los Germán, por Héctor Valdez Albizu, por los Gomes Bergés y Casanova, por Abel Martínez, por José Rafael Vargas, por Julio Cesar Valentín, por Roberto Rosario Márquez, por el fuiquiti de Roberto Salcedo, por “el querido de Puerto Plata” y sus segundas bases. Si votas por Danilo, estas empoderando a Sergio Vargas, a Johnny Ventura, a Quinito Méndez y a su camarilla de artistas de la “desistencia”, para que sigan cogiendo “guto”. Si sufragas por Danilo, estás dando tu aprobación a la “gloriosa vida política” de Leonardo Matos Berrinche, Amílcar Romero y Prim Pujals. Si votas por Danilo, también estarás votando por el honorable eterno cónsul, Eduardo Selman; por el afianzamiento de las cientos de “chapiadores asalariadas” en el Estado; pero también estarás votando, por Margarita Cedeño, Leonel Fernández y su familia y por todos los mafiosos dueños de bancas y de negocios turbios, y por los cínicos peledeistas, que se han hecho multimillonarios de la noche a la mañana robando descaradamente en asociación con narcotraficantes y otros capos. Pero igual, votando por Danilo, también votarás para sigan “montao” en el palo, Miguel Vargas, Peggy Cabral, Fiquito Vásquez, Jorge Prats, los Peña Guaba, Rubén Luna y por toda esa de gente, que también se han hecho multimillonarios vendiendo el glorioso PRD al mejor postor y que se han burlado del pueblo. Es decir, si votas por Danilo, estarás apoyando la continuidad en el poder de todos esos personajes, que se han burlado de Bosch y del país; y también, estarás votando, para que miles de supuestos boschistas, como parásitos de los peores, sigan devengando salarios sin trabajar, que en muchos casos, son de más de 100 mil, y hasta de 200 mil pesos y más.
Danilo Medina no es un hombre de palabra
Danilo Medina no es un hombre de palabra; él mismo con sus actuaciones se ha encargado de confirmarlo. Danilo es un simulador…un mentiroso, con la agravante, que tampoco tiene vergüenza, pues para dirigirse a un público, para sin rubor desmentirse a sí mismo en la forma ceremoniosa que él lo hace, es porque se han perdido los escrúpulos, que acaban con la vergüenza. Para llegar a esta conclusión, basta con ver los videos en los que él expone con tanta seriedad las razones por las cuales nunca iría a una reelección, para después con el mayor descaro, incurrir en la misma. Además, no hay motivos políticos ni sociales, para que el pueblo tenga que reelegirlo, si analizamos, que bajo su mandato no ha resuelto ninguno de los acuciantes problemas del país, siendo que más bien que los ha agravado, como son casos del aumento de la delincuencia y la impunidad, aunque prometió llevar a la justicia a sus funcionarios por el simple rumor público de corrupción. Ante los hechos sobre el tapete, que nadie se llame a engaños, pues no podemos pasar por alto, que este hombre tan parecido físicamente y en sus cínicas actuaciones a Balaguer, ha sido desde sus inicios, parte orgánica de la corrupción del PLD, como jefe del gabinete que era de los gobiernos de Leonel Fernández.
En este contexto analítico, tampoco se debe olvidar, que el Presidente Medina llegó al poder, mediante un fraude, y por el gasto exorbitante de más de 200 mil millones de pesos en su campaña, que causó un déficit fiscal, que para cubrirlo se recurrió a tres abusivas reformas fiscales, cuyos negativos efectos recayeron sobre los más necesitados. Desde su llegada al poder, Danilo comenzó los preparativos para su reelección, pese a teóricamente ser un rabioso opositor a la misma. Con esos fines, de inmediato comenzó las mal llamadas visitas sorpresas e implementó con la complicidad de Roberto Rosario, el cambio de cédula y la desnacionalización de 250 mil dominicos-haitianos, para en esas bregas, dejar sin derecho al voto a casi un millón de dominicanos, que de manera cierta o supuesta votan en oposición al PLD. Finalmente, con el mayor desparpajo, Danilo compró con el dinero del pueblo, los congresistas que apoyaron el cambio en la Constitución, para hacer posible la monstruosidad de la reelección por dos periodos consecutivos.
Otro punto que no debemos soslayar es el concerniente al endeudamiento externo e interno a que Danilo ha sometido al país, haciéndolo más que ningún otro presidente y que ha continuado con la entrega de nuestros recursos naturales a cambio de chilatas para el Estado, mas no así, para los que intervengan en las negociaciones de lugar, tal como ha sucedido con la construcción de la carboelectrica Punta Catalina. Y en todos los casos…la misma búsqueda.
El crecimiento económico de este gobierno mitómano, es ficticio, pues el día que los organismos internacionales se nieguen a prestarnos más dinero y nos exijan pagar, el dólar llegará dispararse hasta más del doscientos por uno. Entonces, cuando llegue ese día, será cuando se verá la realidad de las malas políticas económicas que se han estado implementando en los gobiernos peledeistas, para mantener ficticiamente una economía de relumbrón, de aguaje y bulto, adjunto a una política social de inequidad e iniquidad.
Como se puede colegir de la confrontación entre la prédica y los hechos, es evidente la contradicción y la mitomanía en que incurre el personaje que tenemos de Presidente. Es irritante aceptar al mando de buenas ganas, a alguien, que como Danilo, violenta los valores en que fuimos criados: “Cumplir con la palabra empeñada, es la medida de la seriedad de un hombre”. “Los hombres de honor, cumplen con la palabra prometida”. “No mientas jamás”. “Que tu sí, sea un sí, y tu no, un no”. “por la verdad murió Cristo.” “No digamos jamás la mentira, no engañemos nuestros papás, que no hay cosa más bella que un niño, cuando sabe decir la verdad. La verdad es la cosa más bella; donde está la verdad, está Dios.
A los de mi generación, el malestar que causa el uso del recurso de la mentira por el personaje reeleccionista en cuestión, se acrecienta aún más, cuando afloran en nosotros ciertos pasajes bíblicos que hemos tenido como mantras guías de nuestras vidas: “Hay que domar la lengua. La lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua, siendo uno de nuestros órganos, contamina todo el cuerpo y, encendida por el infierno, prende a su vez fuego a todo el curso de la vida. La lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de hacer grandes cosas”. “Amontonar tesoros con lengua mentirosa, es aliento fugaz de aquellos que buscan la muerte”. Estos versos bíblicos cobran vida y significación, ante un presidente que dice categóricamente que no se reelegirá, pero que después, echando por el suelo su palabra, descaradamente, hace todo lo contrario.
Conclusión
Analizado las informaciones anteriores, fácilmente podemos llegar a la conclusión, de que votar por Danilo, es votar por la permanencia en el poder de toda esa gente anteriormente señaladas, que se han enriquecido obscenamente saqueando las arcas del Estado, burlándose de nuestro pueblo, e hipotecando nuestra patria. Si votas por Danilo, también estarás votando, para que miles de peledeistas sigan cobrando sin trabajar. Si votas por Danilo, también estarás votando para seguir arruinando a nuestro país, más de lo que ya está. De tu votar por Danilo Medina, estarás votando para consolidar una dictadura de partido, enmascarada de democracia formal. De tu votar por la reelección de Danilo… tú llorarás…y lloraremos todos, lágrimas de sangre.
Pero por suerte, todo apunta a que la premonición de Danilo, se dará: “El PLD -profetizó Danilo- de transitar el camino de la reelección; un camino sumamente resbaladizo, innecesario y peligroso, nos llevará a perder las elecciones y por consiguiente, a perder el poder”. Y será así, por los frutos de su lengua mentirosa.
El lector, sea simpatizante o adversario, y la masa silente a quien he dedicado este trabajo, tiene la palabra.