Ramiro Francisco
Cuando uno se entera que el gobierno dominicano a través del Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología MESCyT, logra con el correr de los años que miles de estudiantes puedan cursar diferentes especialismos en post grado en universidades extranjeras y regresar al país a poner en práctica lo aprendido, tal proceder, se puede calificar como un verdadero logro gubernamental.
Miles de millones de pesos empleados para pagar esos estudios sin que se conozca a ciencia cierta, si esos profesionales becados por el gobierno con dinero de nuestros impuestos, se encuentran en República Dominicana ofreciendo sus servicios en desarrollo pleno de la especialidad estudiada.
¿Qué estudiaron? ¿Tecnologías que necesitamos en nuestro país? ¿Avances relacionados con la Agricultura, Medicina, Industria, Minas, Aeronavegación, Tránsito Urbano, Seguridad Cibernética?
¿Dónde se encuentran esos graduados becados prestando sus servicios al regresar al país? ¿En el sector Público o privado?
Para el período 2018-2019, el MECyT da conocer en su convocatoria a Becas Internacionales, Especialidades y Maestrías, que varios países amigos ofrecen determinada cantidad de becas para beneficiar a profesionales dominicanos.
Aquí algunos con la cantidad de becas que ofrecen: EEUU 43, Reino Unido 5, Alemania 5, Francia 30, España con 1,050, la República Checa 5, Italia 5, Suiza 5, Colombia 5, Chile 5, Paraguay 5, mientras que Brasil ofrece 25, Rusia 10 y Portugal 3. Un total de unas 1,231 becas para el período indicado.
¿Cuántos estudiantes dominicanos tenemos en el extranjero becados por el gobierno? ¿Se ajustan esos estudios a las necesidades reales que existen en la República Dominicana?
¿Pueden ellos servir de maestros para enseñar en nuestras universidades las materias aprendidas?
¿En la provincia de Puerto Plata, hay alguien especializado en alguna disciplina beneficiado por el MECYT en universidades fuera del país?
¿Dónde trabaja y cuál es el monto de su sueldo?
¿Ofrece sus conocimientos en la especialidad estudiada, o de secretario, ayudante, mensajero o guardaespalda?
¿Vale la pena estudiar y especializarse para entrar al tren gubernamental?
¿O ante las pocas oportunidades, emigrar al extranjero?
Por supuesto, es más conveniente prepararse a no estarlo.