COOPERSTOWN, Albany.-El profesor Victor Amado Ortega a fuerza de su presencia frecuente en encuentros masivos, fiestas, competencias deportivas y eventos de otra índole, se ha convertido en un personaje de altos kilates en New York y otros estados vecinos.
Ortega posee una gran capacidad de relación, intercomunicación y empatía que le permiten entablar relación con suma facilidad, granjeándose la amistad de personas de todos los ámbitos sociales, donde se le valora por su don de gente y su disposición servicial.
Se cree que el profesor de Educación Física Escolar, árbitro de béisbol y sóftbol y excelente atleta, especialmente en baloncesto, deporte en el que descolló en todos sus niveles, incluyendo en la categoría superior, jugando en equipos de ese deporte en el Club Deportivo-Cultural Gregorio Luperón de Puerto Plata.
Otra faceta en la que se distingue Víctor Ortega en el área altruista, ya que colecta en New York sillas de ruedas, bastones, muletas, Pampers, útiles deportivos y otros utensilios que obsequia a personas menesterosas, asilos de ancianos y otras instituciones caritativas, lo que habla muy bien de su espíritu humanista.
En el pasado Puerto Plata tuvo en Pablo Astwoo (Pablito, el Inglés) otro personaje que le gustaba estar en primer plano, era un gran bailador que supo codearse con gobernadores, alcaldes, congresistas, concejales, artistas y otras connotadas figuras en la gran manzana y en Puerto Plata.
Pablito, el inglés, murió hace algunos años, pero apareció en escena por su propia cuenta y se apropió de su espacio y se ha convertido por su sangre liviana imantada en toda una figura carismática de primer orden en el cultivo de amistad y simpatía.
Si figurar es existir, como dice una máxima filosófica, Víctor Amado Ortega, callejonero cien por ciento se lleva la palma y se coloca en la cima más alta de la popularidad en New York, en su nativa Puerto Plata, en Guananico y Loma de Cabrera, donde vivió e hizo una gran amistad con Fernando Villalona.