PUERTO PLATA.-El director general de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Puerto Plata (CORAAPLATA), ingeniero Oliver Nazario, atribuyó los daños causados por la naturaleza sin los causantes de la desestabilización del suministro de agua a la población.
Explicó que primero se registró una sequía como nunca antes se había registrado en los últimos 30ó 40 años secando las fuentes y ríos que suplen de agua a los acueductos y luego vinieron unas lluvias agresivas que ocasionaron crecidas que impidieron encender los motores.
El titular de CORAAPPLATA dijo en el programa “Todo Incluido” que se transmite por el canal 10 de Musa Visión donde fueron entrevistados por los periodistas Manuel Gilbert y Hugo Gómez que al no poder utilizar el sistema de acueducto para llevar el preciado líquido a los usuarios de ese servicio.
“Así como las sequías traen problemas, también cuando tenemos crecidas tenemos que apagar los motores, porque se nos dañan y tenemos muchos inconvenientes, porque son bastante caros, ya que cada uno cuesta RD$5.0 millones”, indicó el profesional de la ingeniería civil.
Precisó que “duramos tres semanas con problemas diversos en las diferentes zonas que le damos cobertura, pero desde la semana pasa el servicio de suministro de agua se ha estado estabilizando el problema, porque hemos hecho una nueva programación para la ciudad de Puerto Plata”.
Expuso que la operación del 2020 no es la misma del 2023, porque durante la pandemia del COVID 19 los hoteles estaban cerrados y podíamos ser más efectivos, pero ahora los hoteles están abiertos y los 14 barrios de San Marcos demandando agua y hubo que hacer de emergencia un nuevo plan operacional.
“No se preocupen, no se precipiten, no tengan temor, que quienes están conduciendo no sólo el destino de CORAAPLATA, sino también de todo el país, tienen experiencia y saben lo que están haciendo”, expresó con palomo y en tono tranquilizador el ingeniero Oliver Nazario Brugal.
Destacó que las dificultades que hemos tenido este año no son nada comparables con las que se presentaron en julio del año pasado, que tuvimos la tormenta perfecta y salimos hacia delante resolviendo todos los problemas y ahora lo qué han habido tres semanas de inconvenientes.
Informó que durante esas tres semanas de dificultades se limpió la obra de toma, las coculleras, los filtros, la planta de tratamiento, se repararon varias averías importantes, se quitaron varias válvulas madres que cuando se dañan desestabilizan el sistema y se hizo una serie de trabajos para que la nueva operación se realice de manera eficiente.